El título por el camión más grande del mundo tiene nuevo dueño y proviene de un vehículo eléctrico, algo impensable hace pocos años.
El transporte de grandes mercancía es un mundo aparte del sector del automóvil, aquí todo se magnifica, se vuelve inalcanzable y los retos cobran otra dimensión. La electrificación también ha llegado a este sector, algo natural, y ahora nos presentan al camión más grande del mundo, que además de ser enorme, es eléctrico.
Dentro de los fabricantes de camiones, BelAZ es uno de los que tiene mayor reputación, y por esto mismo sus ingenieros decidieron hace algunos años crear el camión más grande del mundo y además dotarlo de la mejor dotación en materia tecnología que fuera posible. Y lo primero era el motor.
Este camión puede transportar siete Airbus A320-200.
Para propulsar un camión que mide 20 metros de longitud, 10 de anchura y 8 de altura no vale con un pequeño motor eléctrico, ni siquiera uno grande. Son necesarios cuatro mecánicas eléctricas fabricadas por Siemens, cada una de ellas con una potencia de 1.200 kW, y con una simple multiplicación resulta que estamos ante un camión cuyo corazón lo mueven más de 6.500 caballos de potencia. ¿Increíble verdad?
En un coche eléctrico, uno de los mayores problemas suele ser el peso del mismo, que es elevado debido a las baterías. En el camión más grande del mundo este dato lo convierte en uno de los más pesados al firmar ante la báscula 360 toneladas, pero lo más impresionante es que puede transportar 500 toneladas, y es este el dato que le permite obtener el ansiado título. Supera en un 25% al camión que ostentaba el título.
Si volvemos al lado mecánico, la mayor ventaja radica precisamente en la propulsión eléctrica, que permite al conductor contar con un sistema de distribución de la tracción dinámico para poder adaptar la potencia que recibe cada eje en tiempo real, una característica, que según los expertos, es muy importante en los terrenos en los que suele trabajar el camión.
Estamos ante un camión eléctrico pero que incorpora dos generadores de gasolina de 16 litros y 1.700 kW para alimentar a los motores eléctricos, una combinación que ya hemos visto en algún coche eléctrico y que consigue reducir al mínimo el consumo de gasolina en comparación a un propulsor convencional. En cuanto a la fiabilidad, desde el fabricante de los motores, Siemens, aseguran que podría funcionar incluso con un motor eléctrico averiado.
